Lecturas del Viernes de la 9ª semana del Tiempo Ordinario


Viernes, 9 de junio de 2017



Primera lectura


Lectura del libro de Tobías (11,5-17):


En aquellos días, Ana estaba sentada, oteando el camino por donde tenía que llegar su hijo. 
Tuvo el presentimiento de que llegaba, y dijo al padre:

«Mira, viene tu hijo con su compañero.»
Rafael dijo a Tobías, antes de llegar a casa: «Estoy seguro de que tu padre recuperará la vista. Úntale los ojos con la hiel del pez; el remedio hará que las nubes de los ojos se contraigan

y se le desprendan. Tu padre recobrará la vista y verá la luz.» 
Ana fue corriendo a arrojarse al cuello de su hijo, diciéndole:

«Te veo, hijo, ya puedo morirme.» 
Y se echó a llorar. Tobit se puso en pie y, tropezando, salió por la puerta del patio. 
Tobías fue hacia él con la hiel del pez en la mano; le sopló en los ojos,

le agarró la mano y le dijo: «Ánimo, padre.» 
Le echó el remedio, se lo aplicó y luego con las dos manos le quitó como una piel

de los lagrimales. 
Tobit se le arrojó al cuello, llorando, mientras decía: «Te veo, hijo, luz de mis ojos.» 
Luego añadió: «Bendito sea Dios, bendito su gran nombre,

benditos todos sus santos ángeles. Que su nombre glorioso nos proteja,

porque si antes me castigó, ahora veo a mi hijo Tobías.» 
Tobías entró en casa contento y bendiciendo a Dios a voz en cuello. 
Luego le contó a su padre lo bien que les había salido el viaje: traía el dinero

y se había casado con Sara, la hija de Ragüel: «Está ya cerca, a las puertas de Nínive.» 
Tobit salió al encuentro de su nuera, hacia las puertas de Nínive.

Iba contento y bendiciendo a Dios, y los ninivitas, al verlo caminar

con paso firme y sin ningún lazarillo, se sorprendían.

Tobit les confesaba

abiertamente que Dios había tenido misericordia y le había devuelto la vista. 
Cuando llegó cerca de Sara, mujer de su hijo Tobías, le echó esta bendición:

«¡Bien venida, hija! Bendito sea tu Dios, que te ha traído aquí.

Bendito sea tu padre, bendito mi hijo Tobías, y bendita tú, hija.

¡Bien venida a ésta tu casa! Que goces de alegría y bienestar. Entra, hija.» 
Todos los judíos de Nínive celebraron aquel día una gran fiesta.

Palabra de Dios



Salmo responsorial


Sal 145, 1-2. 6b-7. 8-9a. 9bc-10

R/. 
R/. Alaba, alma mía, al Señor



Alaba, alma mía, al Señor: 
alabaré al Señor mientras viva, 
tañeré para mi Dios mientras exista.  
R/.

Que mantiene su fidelidad perpetuamente, 
que hace justicia a los oprimidos, 
que da pan a los hambrientos. 
El Señor liberta a los cautivos.  
R/. 

El Señor abre los ojos al ciego, 
el Señor endereza a los que ya se doblan, 
el Señor ama a los justos. 
El Señor guarda a los peregrinos.  
R/.



Sustenta al huérfano y a la viuda 
y trastorna el camino de los malvados. 
El Señor reina eternamente, 
tu Dios, Sión, de edad en edad. 
R/.



Evangelio


Lectura del santo evangelio según san Marcos (12,35-37):

En aquel tiempo, mientras enseñaba en el templo, Jesús preguntó:

«¿Cómo dicen los escribas que el Mesías es hijo de David?

El mismo David, inspirado por el Espíritu Santo, dice:

"Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi derecha, y haré de tus enemigos

estrado de tus pies." Si el mismo David lo llama Señor, ¿cómo puede ser hijo suyo?» 
La gente, que era mucha, disfrutaba escuchándolo.



Palabra del Señor





Liturgia Viva del Viernes de la 9ª semana del Tiempo Ordinario


Viernes, 9 de junio de 2017



Colecta


Señor, Dios nuestro, la persona que entregó su vida para liberarnos

de nuestras limitaciones humanas y para permitirnos vivir en tu Reino

es tu Hijo mismo y Señor nuestro, Jesucristo. Danos auténtica sabiduría

para aceptarle como el Señor de nuestras vidas y como tu presencia amorosa

entre nosotros. Que él nos dirija hacia ti, Dios nuestro, por los siglos de los siglos.
R/ Amén.



 Intenciones

Que podamos reconocer y amar a Jesús, que es como uno de nosotros,

que nos conoce y comparte nuestras luchas y nuestras inquietudes.

Roguemos al Señor.


Que la gente acepte a Cristo en todas las latitudes, no solo como una gran

personalidad humana, sino sobre todo como su Señor y Salvador.

Roguemos al Señor.


Que nuestras comunidades sepan reconocer a Cristo y a su Espíritu

como la fuerza de amor y de amistad que nos une y vincula

a todos como hermanos. Roguemos al Señor.



Oración sobre las Ofrendas 


Dios y Señor nuestro: En este pan y este vino, que ahora te ofrecemos,

acepta nuestra fe y nuestro compromiso por Jesús como nuestro Señor y Salvador.

Que él nos ayude a crecer en fe y en paciencia, en amor y constancia,

para que estemos dispuestos para cualquier obra buena

y para encontrarte y acogerte a ti y a los hermanos. 
Por Jesucristo nuestro Señor.
R/ Amén.

Oración después de la Comunión


Oh Padre de nuestro Señor Jesucristo:
Tu Hijo está con nosotros como nuestro hermano y Salvador.

Nos produce profunda alegría el que se haya hecho como uno de nosotros,

humano, que respira, que se alimenta, que vive como nosotros.

Queremos ser y vivir como él. Que su sufrimiento sea nuestra victoria,

su humillación nuestro honor, su inocencia nuestra justicia, su muerte nuestra vida,

su resurrección nuestro bienestar, porque Él es nuestro Señor

por los siglos de los siglos. R/ Amén
(Basada en una oración de Caspar Newmann, +1700)

Bendición 


Creemos en Jesucristo, nacido de María Virgen, que es uno de nosotros,

tan humano, pero que es más que una simple persona humana:

El es Hijo de Dios y Salvador nuestro. Que Dios todopoderoso confirme

en ustedes la fe y les bendiga abundantemente, el Padre, el Hijo

y el Espíritu Santo.R/ Amén.












​​​       SOS-SOPLO DE SANTIDAD

       A DONDE MANDES IREMOS . . .


MINISTERIO CATÓLICO MISIONERO DE EVANGELIZACIÓN

LO QUE NOS PIDAS HAREMOS

SOS-SOPLO DE SANTIDAD

LO QUE NOS PIDAS...HAREMOS

​​​​











​​




A A DONDE MANDES...IREMOS

​​​​



MINISTERIO CATOLICO MISIONERO DE EVANGELIZACION 

​​














DIA 9



​ACTO DE CONTRICCIÓN 

El Sagrado Corazón, modelo de desprendimiento 


Se hace aquí la meditación correspondiente a cada día del mes de junio.

1

 La virtud que quiere enseñarnos hoy el Sagrado Corazón de Jesús
es la del desprendimiento.  Tan desprendido de todo lo humano estuvo 
el Sagrado Corazón que nada ejercía sobre Él peso ni influencia alguna
como no fuera la voluntad de su Padre celestial. Estuvo desprendido 
de cualquier interés material, hasta el punto de nacer privado de todo
en una cueva y de morir desnudo del todo en una cruz.  Y en el intermedio de su vida

nunca tuvo cosa que llamase suya.  Las limosnas que le daba la piedad de los fieles 
las devolvía Él a los pobres o las depositaba en poder de sus discípulos. 
 En cuanto a los afectos de sangre, ninguno de ellos pesó para nada en la libertad
y el desprendimiento de su Corazón.  Niño aún, dejó a su Madre y a San José,
y se separó por tres días de su compañía.  Y cuando sus padres se atrevieron a hacerle 
una queja, les respondió así: “¿No sabían que a Mí me toca atender primero 
a las cosas de mi Padre celestial?” Era la suya una sublime libertad de espíritu;
un total desprendimiento de lazos humanos; una soberana independencia:
la independencia de un corazón entregado únicamente a Dios. 


Se medita unos momentos

2

Oh, Jesús, nuestro corazón es esclavo de tantos señores y está atado

a tan miserables cadenas que no sabe volar hacia Ti.

 Lo ata el amor a los bienes temporales; el ansia por las comodidades;

el afecto exagerado a los amigos.  Nuestro corazón ha echado tan profundas raíces

en esta tierra que le rodea, que no sabe vivir sino con ella y por ella.

 Y así como la planta se nutre y se forma de los jugos

que bebe del suelo por medio de sus raíces, así nuestro corazón vive y se nutre

sólo de la materia del mundo, por medio de los mil y un afectos que le tienen atado a él. Desarraiga, Jesús, nuestra alma de esta tierra en la que no crece como debiera hacerlo,

es decir, sólo para Ti.  Vivamos en este mundo sólo corporalmente, pero espiritualmente

vivamos fuera de él.  Que no nos llenen afectos humanos puesto que estamos llamados

a poseer un objetivo divino.  Haz que no encontremos ilusión en todo lo que no seas Tú,

para que no se apegue el corazón más que a Ti. Si Contigo tan sólo hemos de reinar

eternamente, ¿cómo es que tan fácil entregamos el corazón a criaturas

que pronto hemos de abandonar…?




                                 Se medita unos momentos  y se pide una gracia particular para este día


                           Aquí se rezará tres veces el Padrenuestro, Avemaría y Gloria, en recuerdo 
                         de las tres insignias: cruz, corona y herida de la lanza, con que se apareció
                         el Sagrado Corazón a santa María Margarita Alacoque. Luego, se rezan las…



   
     LETANÍAS AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS


                      -Señor, ten piedad de nosotros.            R./lo mismo en cada uno                                               
                      -Cristo, ten piedad de nosotros.  
                      -Señor, ten piedad de nosotros.
                      -Cristo, óyenos. 
                      -Cristo, escúchanos.  


 
                      -Dios, Padre Celestial                                R./ ten piedad de nosotros ...en cada uno                   
                      -Dios Hijo, Redentor del mundo, 
                      -Dios, Espíritu Santo,
                      -Santísima Trinidad, que eres un solo Dios, 
                      -Corazón de Jesús, Hijo del Eterno Padre, 
                      -Corazón de Jesús, formado en el seno de la Virgen Madre por el Espíritu Santo, 
                      -Corazón de Jesús, unido sustancialmente al Verbo de Dios, 
                      -Corazón de Jesús, de infinita majestad, 
                     -Corazón de Jesús, templo santo de Dios,
                     -Corazón de Jesús, tabernáculo del Altísimo,
                     -Corazón de Jesús, casa de Dios y puerta del cielo, 
                     -Corazón de Jesús, horno ardiente de caridad, 
                     -Corazón de Jesús, santuario de la justicia y del amor,  
                     -Corazón de Jesús, lleno de bondad y de amor, 
                     -Corazón de Jesús, abismo de todas las virtudes, 
                     -Corazón de Jesús, digno de toda alabanza, 
                     -Corazón de Jesús, Rey y centro de todos los corazones, 
                     -Corazón de Jesús, en quien se hallan todos los tesoros 
                      de la sabiduría y de la ciencia,
                     -Corazón de Jesús, en quien reside toda la plenitud de la divinidad, 
                     -Corazón de Jesús, en quien el Padre se complace,
                     -Corazón de Jesús, de cuya plenitud todos hemos recibido,
                     -Corazón de Jesús, deseado de las eternas colinas,
                     -Corazón de Jesús, paciente y lleno de misericordia, 
                     -Corazón de Jesús, generoso para todos los que te invocan,
                     -Corazón de Jesús, fuente de vida y santidad, 
                     -Corazón de Jesús, propiciación por nuestros pecados, 
                     -Corazón de Jesús, colmado de oprobios, 
                     -Corazón de Jesús, triturado por nuestros pecados,
                     -Corazón de Jesús, hecho obediente hasta la muerte, 
                     -Corazón de Jesús, traspasado por una lanza, 
                     -Corazón de Jesús, fuente de todo consuelo, 
                     -Corazón de Jesús, vida y resurrección nuestra,
                     -Corazón de Jesús, paz y reconciliación nuestra,
                     -Corazón de Jesús, víctima por los pecadores, 
                     -Corazón de Jesús, salvación de los que en Ti esperan, 
                     -Corazón de Jesús, esperanza de los que en Ti mueren,
                     -Corazón de Jesús, delicia de todos los santos, 


          -Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,   R./ Perdonanos Señor
          -Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,    R./Escúchanos Señor
          -Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,    R./ten piedad de nosotros
         -Jesús, manso y humilde de Corazón,       R./Haz nuestro corazón semejante al tuyo.  


                                     ORACIÓN FINAL 


                            Oh, Dios todopoderoso y eterno, mira en el Corazón de tu amadísimo Hijo 
                            las alabanzas y satisfacciones que en nombre de los pecadores te ofrece, 
                            y concede el perdón a estos hijos tuyos que piden misericordia en el nombre 
                           de tu mismo Hijo, nuestro Señor Jesucristo, el cual vive y reina contigo
                           en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.Amén




                      SAGRADO CORAZÓN DE JESUS

                                    EN VOS CONFÍO